La Universidad Nacional Abierta y a Distancia mantiene viva la utopía y determinación de cumplir con el mandato misional de “Educación para todos”, afianzándose como una organización inteligente que, sin dejar de aprender, crecer, innovar y mejorar continuamente, seguirá llegando con sus servicios educativos de alta calidad, a todas las poblaciones de Colombia y a todos los colombianos en cualquier lugar del planeta.
En este sentido, vemos cómo, de manera sistémica y compleja, la Unad va tejiendo redes de apoyo, no sólo internas, sino también externas, que nos permiten cada vez más –a partir de un marcado reconocimiento del entorno-, ofrecer servicios pertinentes para la comunidad en general.
En ese reconocimiento del entorno hemos comprendido que vivimos en un mundo interconectado y globalizado, situación que le da voz a toda la comunidad educativa y también a voces que antaño jamás hubieran tenido oportunidad de darse a conocer.
Convertirnos en una organización inteligente implica, por lo tanto –como en cualquier sistema vivo-, mantenernos en continua realimentación, autoevaluación y revisión, para identificar cuándo debemos hacer altos en el camino y, con base en las nuevas posibilidades delimitadas, trazar estrategias para afianzar mejor nuestro derrotero y consolidar nuestra misión.
Desde el año 2004 venimos recorriendo esta ruta y hemos ido construyendo desde los propios cimientos institucionales la organización inteligente que pretendemos ser. Para ello hemos generado de manera colectiva procesos de cambios organizacionales y académicos, que apuntan siempre al ofrecimiento de más y mejores programas educativos, así como de más y mejores programas socioeducativos para las comunidades, centrados todos en el desarrollo humano sostenible y solidario.
En estos últimos ocho años la Unad ha crecido exponencialmente, tanto en cobertura poblacional como regional; ha crecido de manera sistemática en su organización interna, en su organización presupuestal y financiera y en su organización académica e investigativa. La construcción participativa del proyecto, apoyado en la innovación y el uso de tecnologías de punta, han sido nuestros acompañantes permanentes, así como la vinculación cada vez más amplia, de múltiples organizaciones que le han dado su voto de confianza a nuestra gestión.
En este contexto, el Consejo Superior –como dinamizador de la alta política Unadista-, se ha trazado como propósito la realización de ajustes a nuestra normatividad, con el fin de lograr cada vez más, mayores niveles de coherencia entre nuestro querer y nuestro hacer. En este orden de ideas, ha aprobado importantes modificaciones al Estatuto General, haciendo partícipe a los diferentes estamentos universitarios, a través de convocatoria para que hiciesen recomendaciones acorde con sus propias experiencias y conocimientos. Se recibieron propuestas de las diferentes Zonas y Centros, de distintos estamentos y a título personal de funcionarios y estudiantes, que fueron evaluadas según criterios de pertinencia, que se incluyeron en el borrador que analizó el Consejo Superior en primer debate. De aquí resultaron recomendaciones para la clarificación, ampliación o delimitación de las propuestas y, en segundo debate, realizado el 1o de abril en la Zona Amazonia Orinoquia, el Consejo Superior aprobó las modificaciones correspondientes.
Agradezco profundamente la participación de la comunidad universitaria en este empeño, que le da legitimidad a las decisiones asumidas. Del mismo modo, este apoyo y participación a través de la plataforma virtual, nos muestra el potencial efectivo que tienen los desarrollos tecnológicos en la gestión individual y colectiva para la generación soluciones, cambios y consolidación organizacional. Con las nuevas modificaciones, el Estatuto General nos sigue marcando las directrices que hemos de asumir para cualificar cada día más nuestra gestión de servicios educativos con equidad y calidad global.
Por ello, la nueva versión del Estatuto General está disponible en nuestro portal y debe convertirse en objeto de estudio y comprensión de cada uno de los miembros de la Unad. Muchos de ustedes verán reflejados sus aportes en el mismo y sentirán la satisfacción de haber aportado en la construcción de este proyecto educativo incluyente.
Reciban todos un abrazo y la invitación para que sigan participando de manera activa en los nuevos escenarios de consolidación que seguimos impulsando.
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